Bell Ville lanza histórica licitación para el servicio de agua y cloacas
El Concejo Deliberante aprobó en primera lectura el proyecto que define un nuevo marco contractual para el servicio, con más controles, obras obligatorias y participación ciudadana.
El Concejo Deliberante de Bell Ville avanza con un proceso que marca un antes y un después en la prestación de los servicios de agua y cloacas en la ciudad. La presidenta del cuerpo legislativo, Noelia Ferrari, anunció que ya está en marcha el llamado a licitación pública para una nueva concesión, que sustituirá al contrato vigente desde 1995. La propuesta fue aprobada en primera lectura y se convocó a una audiencia pública para el lunes 12 de mayo a las 20 h, donde vecinos e instituciones podrán expresar sus opiniones y sugerencias.
Ferrari destacó el carácter histórico del proceso y la voluntad de garantizar un espacio real de participación ciudadana. Además, explicó que cualquier vecino puede acceder al proyecto del pliego de condiciones, el cual fue elaborado con asesoría técnica especializada. El objetivo es brindar transparencia y claridad tanto para el municipio como para la empresa que asuma la concesión.
Desde el bloque opositor, el concejal Germán Villarroel celebró la modalidad de licitación pública como garantía de competencia y transparencia. Resaltó que el nuevo contrato contempla una fórmula polinómica para calcular la tarifa, lo que brindará previsibilidad a los usuarios. También se incorporan cláusulas de obras obligatorias y el principio de universalidad del servicio, que asegura que ningún vecino quede excluido por razones económicas. Villarroel subrayó que el municipio recuperará un rol activo en el control tarifario, en articulación con el ERSEP.
Por su parte, el concejal Fermín Imán puso el foco en los avances técnicos que se exigirán al futuro prestador del servicio. Entre las condiciones establecidas se incluye la instalación de micromedidores domiciliarios, sistemas de medición zonal y el reemplazo de cañerías troncales. También se creará un fondo específico para mejoras sostenidas en la infraestructura de agua y saneamiento, lo que garantiza una base jurídica para controlar y exigir cumplimiento durante los próximos 15 años.
Los concejales coincidieron en que este proceso representa un cambio profundo respecto al contrato anterior, que carecía de muchas de estas obligaciones. También destacaron el trabajo conjunto entre bloques y el compromiso con mejorar un servicio esencial para los vecinos de Bell Ville.
