"El Ángel" (8-0, 6 KO / 88,300), que por primera vez como profesional peleó en Córdoba capital, salió dispuesto a acabar rápido con las acciones. Luego de un primer round en el que avisó con algunos golpes rectos, el segundo capítulo fue determinante: tras enviarlo a la lona en dos oportunidades, Víctor Correa, árbitro del combate, detuvo -tardíamente- lo que se convirtió en una verdadera paliza.
Aunque comenzó tenso, preso de la ansiedad por mostrarse en la capital provincial, Gudiño se sacó de encima a un oponente de consideración, de esos que poco a poco le irán poniendo enfrente para saber hasta dónde puede llegar este medio pesado que tiene mano picante, se entrena a conciencia y está rodeado de un público fiel dispuesto a seguirlo hasta el final.