
Farmacéuticos de Bell Ville alertan por la crisis: el atraso de PAMI frena la entrega de medicamentos
Víctor Ramello, presidente del Colegio de Farmacéuticos local, advirtió que la demora de casi mes y medio en los pagos de PAMI ya paraliza la cadena de suministro y compromete la atención a pacientes
La situación de las farmacias de Bell Ville atraviesa un momento crítico. Según explicó el presidente del Colegio de Farmacéuticos, Víctor Ramello, el atraso en los pagos de PAMI, que ya acumula casi mes y medio, generó un impacto directo en la capacidad de los comercios para sostener su actividad diaria. Con un 70% de las ventas vinculadas a la obra social, la falta de actualización en los desembolsos cortó por completo la cadena de pagos.
Ramello detalló que, al no recibir los montos comprometidos cada quince días, las farmacias dejaron de poder cumplir con las droguerías, que a su vez restringen los envíos al agotarse los cupos de compra. Esto no solo afecta la provisión para afiliados de PAMI, sino para todas las obras sociales, dejando a los establecimientos sin stock para atender la demanda habitual.
El dirigente señaló que esta situación impacta también en las obligaciones básicas de cada farmacia: alquileres, salarios, servicios y crecientes exigencias administrativas. La falta de pago vuelve insostenible incluso la gestión cotidiana.
Una de las consecuencias más delicadas aparece en medicamentos esenciales, como la insulina, cuyo costo puede superar los 500 mil pesos. Con la imposibilidad de reponerlos, las farmacias enfrentan la decisión de endeudarse gravemente o dejar sin respuesta a pacientes que dependen de ellos. Ramello expresó que muchos afiliados deben recorrer distintas farmacias para conseguir los tratamientos, pese a que no existe sustituto posible para estos fármacos.
En las últimas horas comenzaron a circular “documentos de pago” emitidos por laboratorios, una herramienta que, según explicó, solo prolonga la crisis. Estos documentos permiten liberar momentáneamente medicamentos desde las droguerías, pero serán un compromiso adicional a afrontar cuando PAMI concrete los pagos pendientes.
Ramello señaló además que el atraso es un problema nacional. Indicó que mientras en Córdoba los colegios farmacéuticos trabajan activamente para visibilizar la situación, la conducción de la Confederación Farmacéutica Argentina aún no emitió pronunciamientos formales, lo que genera desconcierto. También cuestionó que, pese a la falta de pagos y la ausencia de un nuevo cronograma, desde PAMI no haya definiciones públicas claras, e incluso haya existido desmentidas en algunos medios sobre la existencia de deuda.
La preocupación del sector se profundiza ante la falta de previsibilidad. Sin un calendario actualizado ni información certera, las farmacias aseguran que no pueden proyectar su funcionamiento y temen que la provisión continúe paralizada.